¿Cuándo es seguro que los bebés duerman con mantas?
Cuando tienes un bebé, cualquier detalle relacionado con el sueño genera dudas. Una de las más comunes es esta:
¿cuándo puede mi bebé dormir con una manta sin que sea peligroso?
La preocupación es lógica. Queremos que esté calentito, cómodo… pero sobre todo seguro. Y aquí conviene dejar algo claro desde el principio: durante el primer año de vida, menos es más en la cuna.
Vamos paso a paso.

¿A partir de qué edad pueden dormir los bebés con mantas?
La recomendación general de pediatras y organismos de seguridad infantil es clara:
👉 no se deben usar mantas sueltas antes de los 12 meses de edad.
A partir del primer año, algunos bebés pueden empezar a usar mantas pequeñas y ligeras, siempre que se cumplan ciertas condiciones de seguridad que veremos más adelante.
Pero, ¿por qué esperar tanto?
Por qué no se recomiendan mantas antes del primer año
Reducción del riesgo de SMSL
El Síndrome de Muerte Súbita del Lactante (SMSL) es el principal motivo por el que se desaconsejan las mantas, almohadas y objetos sueltos en la cuna.
Algunos datos importantes para entenderlo:
- El riesgo de SMSL es mayor entre los 2 y 4 meses.
- Aproximadamente el 90% de los casos ocurren antes de los 6 meses.
- El riesgo disminuye progresivamente, pero no se considera bajo hasta después del primer año.
Las mantas sueltas pueden cubrir la cara del bebé y dificultar la respiración, especialmente cuando aún no tiene suficiente control corporal.
Desarrollo físico y fuerza del bebé
Alrededor de los 12 meses, la mayoría de los bebés ya:
- Se giran con facilidad.
- Se sientan y se incorporan solos.
- Pueden retirar objetos de su cara si les molestan.
- Tienen mayor control del cuello y la cabeza.
Esto reduce el riesgo de asfixia, aunque no lo elimina por completo. Por eso, la edad es importante, pero no es el único factor.
Otros factores a tener en cuenta además de la edad
Antes de introducir una manta, conviene observar a tu bebé:
- ¿Se mueve con soltura?
- ¿Puede incorporarse o girarse sin ayuda?
- ¿Reacciona si algo le cubre la cara?
Si todavía notas que le cuesta moverse o que duerme muy profundamente sin reaccionar, mejor esperar, aunque ya tenga un año.
Alternativas seguras a las mantas para bebés
La buena noticia es que no necesitas una manta para que tu bebé duerma calentito y seguro, incluso en invierno.
Sacos de dormir para bebés
Los sacos de dormir son la opción más recomendada durante el primer año (y más allá).
Sus ventajas:
- Mantienen al bebé abrigado sin riesgo de que algo cubra su cara.
- No se destapan durante la noche.
- Permiten libertad de movimiento.
- Facilitan una temperatura más estable.
Existen sacos de diferentes grosores según la estación del año, lo que los hace muy versátiles.
Ropa adecuada por capas
Otra opción segura es:
- Body de manga larga.
- Pijama adecuado a la temperatura.
- Un saco de dormir ligero o medio.
Esto evita el uso de mantas y reduce el riesgo de sobrecalentamiento, que también es un factor relacionado con el SMSL.
¿Y si ya tiene más de un año y quiero usar manta?
Si tu bebé ya ha cumplido 12 meses o más y decides introducir una manta, ten en cuenta estas pautas básicas.
Tamaño y colocación
- La manta debe ser pequeña.
- Colócala desde el pecho hacia abajo, nunca hasta el cuello.
- Evita mantas grandes que puedan enredarse.
Material transpirable
Elige siempre materiales como:
- Algodón.
- Muselina.
- Tejidos naturales y ligeros.
Evita mantas pesadas, acolchadas o con pelo largo.
Evitar el sobrecalentamiento
El exceso de calor también es un riesgo. Como referencia general:
- La habitación debe estar entre 20 y 22 ºC.
- Si tú estás cómodo con una capa ligera, probablemente tu bebé también lo esté.
Un truco sencillo: toca su nuca, no sus manos o pies. Si está sudorosa, tiene demasiado calor.
Colecho y uso de mantas
El tema del colecho genera muchas dudas. De forma general:
- Durante el primer año, no se recomienda usar mantas sueltas cerca del bebé.
- Si se practica colecho con un niño mayor, es fundamental:
- Usar mantas ligeras.
- Evitar edredones, nórdicos o mantas gruesas.
- Mantener la zona del bebé despejada.
La seguridad siempre debe estar por encima de la comodidad.
¿Se pueden poner juguetes en la cuna?
Antes del primer año:
👉 no. La cuna debe estar vacía.
Después del año:
- Se puede introducir un único peluche pequeño o juguete blando.
- Sin piezas pequeñas, cordones ni elementos desprendibles.
- Sin llenar la cuna. El bebé necesita espacio para moverse.
Conclusión: seguridad, sentido común y tranquilidad
La pregunta no es solo cuándo usar mantas, sino cómo garantizar un entorno de sueño seguro.
En resumen:
- Antes de los 12 meses, nada de mantas sueltas.
- Los sacos de dormir son la opción más segura y práctica.
- A partir del año, se pueden introducir mantas pequeñas y ligeras, con precaución.
- Menos objetos en la cuna significa menos riesgos.
Dormir bien es importante, pero dormir seguro lo es aún más. Y cuando tienes la información clara, también descansas tú.


