¿Qué colores ven los bebés y cómo les afectan?
El mundo de los bebés para los padres está repleto de numerosos colores, simpáticos personajes y tonos alegres. Los bebés, por otro lado, ven el mismo mundo de una manera completamente diferente.
La visión se desarrolla a lo largo del primer año. Un bebé nace con los órganos oculares desarrollados, pero los centros responsables de la visión en el cerebro no están completamente desarrollados al nacer. Además, los músculos de los ojos se fortalecen durante el primer año.
Las primeras semanas después del nacimiento todos los bebés miran tenuemente, no pueden ver objetos o caras con claridad. Durante este período, los ojos del bebé reaccionan a la luz y la oscuridad y notan el contraste del blanco y el negro.
Durante en el segundo mes, la visión se agudiza bien, el bebé ve claramente los objetos a una distancia de 25 centímetros.
En algún momento en el cuarto mes, el bebé comienza a ver colores y se trata de colores vivos básicos: rojo, amarillo, verde y azul. Los ojos del bebé ven otros colores y tonos, pero el centro del cerebro aún no está lo suficientemente desarrollado para que el bebé los reconozca.
En el periodo del cuarto al 18 mes, el bebé aprende a reconocer los colores y comienza a notar similitudes y diferencias entre diferentes tamaños, formas y texturas.
Algunos niños ya pueden alrededor de los dos años nombrar y clasificar colores, mientras que la mayoría de ellos comienzan a reconocerlos solo alrededor de los tres años.
¿Qué color elegir para la habitación de los niños?
Los colores rodean nuestro mundo y de la misma manera que afectan el estado de ánimo de los adultos, también pueden afectar el estado de ánimo de los bebés y los niños. Sigue estos consejos para la decoración de la habitación de tu bebé.
Algunos datos sobre los colores y los niños:
- Los niños responden bien a los colores brillantes porque son animados como ellos.
- Los colores suaves y pasteles son la mejor opción para los dormitorios infantiles.
- El color amarillo brillante puede causar rabia e ira, así como frustración en los niños pequeños.
- Para los niños pequeños que luchan con las rabietas, el azul claro puede ayudar.
Si tiene la oportunidad, pinta las paredes de su hogar de acuerdo con cómo afectan el estado de ánimo. Elija inteligentemente los colores para los niños y el dormitorio.
El color rojo y como afecta niños
El color rojo no se usa accidentalmente para señalización y alarma, es un color que llama la atención. Evoca sentimientos poderosos como la pasión, la fuerza y el deseo.
No es la mejor opción para la habitación de un niño, pero puede prevenir la apatía y el letargo. El color rojo es bueno en pequeñas dosis.
El color azul en los niños
El cielo es azul y el agua es azul, las dos superficies naturales más grandes. El color azul siempre se asocia con la paz, la pureza y la tranquilidad, es el color de la unidad, la armonía y la seguridad.
El azul promueve la relajación y tiene la capacidad de refrescarse, por lo que también es bueno para los bebés que están enfermos y tienen temperatura elevada.
Color amarillo y niños
Demasiado amarillo puede causar ira y frustración, pero en pequeñas cantidades puede ser estimulante.
Usar color naranja para niños
El naranja es una mezcla de amarillo y rojo. Es el color de la felicidad y la alegría, y fomenta la confianza en uno mismo y la independencia.
El color verde y los niños
El color verde siempre aporta un toque de naturaleza. Es un color relajante y se cree que cada recuperación es más fácil con él.
El verde también fomenta la concentración, por lo que los niños que crecen con verde están más tranquilos y pueden concentrarse más fácilmente en ciertas tareas.
El color morado y los niños
El púrpura siempre se asocia con la espiritualidad y también es un color calmante.
Al igual que el azul, el violeta claro es una muy buena opción para las paredes de los dormitorios infantiles.
Blanco y negro en niños
El color blanco simboliza la pureza y la inocencia y es una opción perfecta para cualquier espacio, especialmente para la habitación de un recién nacido. El blanco se asocia con todo lo que es bueno, y todos los demás colores van bien con el blanco.
El negro es un color que es símbolo de elegancia y riqueza, y destila poder y autoridad. Pero grandes cantidades de negro pueden oscurecer demasiado la habitación, lo que no es bueno durante el desarrollo de los niños.
Pero pequeñas cantidades de negro en combinación con blanco o colores claros crean un gran contraste que incluso los bebés pequeños ya pueden ver.
¿Cómo puede un niño aprender a distinguir los colores?
Un poco antes del segundo cumpleaños, en ese momento en el que el niño ya empieza a balbucear todo tipo de cosas y absorbe la información como una esponja, llega el momento de jugar con los colores.
Empieza fácil, con colores básicos y juega de forma sencilla. Tome un montón de bolas de plástico ligeras y tírelas a la canasta diciendo su color.
Junto con el niño, ordénalos de modo que coloques todas las bolas amarillas en un montón y todas las bolas azules en otro. Puedes hacer lo mismo con cubos de colores. ¡Invita a tu hijo a jugar a los colores contigo! Será divertido.
